De tanto buscar, de tanto escarbar
tengo tierra en las uñas,
piojos en la barriga,
los ojos miopes y desgastados,
hongos en los dedos,
la putrefacción ha llegado a tu carne,
está disfrazada de edad,
de vereda de parques,
y te veo sentado en el banco de madera,
perdido, esperando, inerte,
el cuello seboso y la mirada torcida,
y las manos aferradas a una bolsa de papel donde llevas tus palabras,
o la botella que te las ilumina,
liquido infiel que desnuda tu creación,
la pública mentira,
el pobre pregón de tu ruina,
que empaña tus gafas,
destape de tu miseria heredada,
el final anunciado.......
ahí que ver donde hemos llegado....
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